Se acerca el 1 de Noviembre y la noche de Todos los Santos. Aunque ahora hace años que ya no lo hago, esa noche solía leer El monte de las ánimas de Gustavo Adolfo Becquer y os aseguro que con eso ya tenía bastante "emoción" para toda la noche.
Si el romanticismo español es lo vuestro, aquí tenéis una buena excusa para releer las leyendas de Becquer.
Si vais más con la moda del momento y lo vuestro son los vampiros, un clásico imprescindible es Drácula, de Bram Stoker. Considerada en su momento casi como una novela erótica (eso de morder a mujeres en el cuello...¡ejem!) el texto original os reserva bastantes sorpresas para aquellos que sólo conocen al mito a través del celuloide.
Y ya que vamos de clásicos, crucemos el charco para encontrarnos con el atormentado Edgar Allan Poe, otro romántico con un desarrollado gusto por lo siniestro.
Yo, lo confieso abiertamente, tengo cierta debilidad por la literatura inglesa. Pensando en esta entrada para el blog, he desempolvado ( y no es metafórico) de mi estantería dos libros a los que les tengo bastante cariño. Son una recopilación de textos de fantasmas de un puñado de autores ingleses que publicó Edhasa en 1989 y que cuenta con textos de autores como Sir walter Scott, Henry James o H.G. Wells entre otros.
Sea cual sea vuestra elección, si encontráis un hueco la próxima noche de Todos los Santos y leéis alguna de estas historias, seguro que el ambiente especial que se crea convertirá la experiencia en algo memorable.
Nos seguimos leyendo.
