jueves, 4 de junio de 2015

JUNIO. Diario de invierno

Paul Auster, comparte su aprendizaje de la existencia a través de retazos autobiográficos desde su niñez hasta la edad de los 64 años. Los enumera manteniendo una conversación consigo mismo de forma impulsiva, tal como le sugiere su memoria o los actos "del ahora", hasta adentrarse en la esencia del ser humano. Momentos sobre, el miedo, el amor, las relaciones de pareja, las relaciones familiares, la muerte, la enfermedad, la decadencia, la raza, los hijos, un estudio sociológico de un momento determinado, de un instante que el ha experimentado y que forma parte de un libro muy particular "su vida"

domingo, 3 de mayo de 2015

Mayo. Otelo





Creo recordar que he sido roseauniana desde pequeña. De esas personas que piensan que todo el mundo es bueno y solo las circunstancias hacen que se comporten de otra forma.

Otelo, hace unos tres años abrió para mí el universo del ardid y la capacidad de algunos para justificar los medios (lícitos o no) para conseguir un fin u objetivo. Algo que para mí permanecía en el punto ciego de mi entorno.

Hubo un tiempo en que creí que solo podíamos ser malos si nuestras circunstancias eran desgraciadas. Ahora he aprendido que la trama y el cotilleo están muchas veces antes de una gran traición. El ser bueno, tiene más que ver con la personalidad y la forma de entender la vida, que con las circunstancias vividas.
Otelo acaba con la vida de Desdémona como tantas personas acaban con parte de la vida de los que nos rodean. Es tan fácil ser perverso....

Otelo permitió encender la luz en el lado oscuro de las personas. Algo tarde quizás, pero más real de lo que en su momento me aporto la filosofía de Rouseau.

Queridas amigas, doy la bienvenida a Otelo, al ardid, la traición y al final trágico como tantas veces en la vida.

Carmen 

martes, 14 de abril de 2015

Abril. Los desorientados


El autor: 
Amin Maalouf, nació en Beirut en 1949, de donde se exilió a Paris, cuando estalló la guerra en Líbano en 1975. Autor conocido fundamentalmente por su novela histórica “León el Africano”, pone de relieve la confrontación entre oriente-occidente y la necesidad de tender puentes entre ambas culturas.  Es éste un tema recurrente en la mayor parte de su bibliografía y también en ésta su última novela.  Premio Príncipe de Asturias, Premio Goncourt  y miembro de la Academia Francesa, es un referente de la literatura actual, aplaudido por la crítica y el público.






La novela:
Adam, profesor de historia exiliado en París,  regresa  a su país natal  tras 24 años de haberlo abandonado a causa de la guerra. El motivo del regreso es la llamada de la esposa de un antiguo amigo que está a punto de morir.  El viaje a sus orígenes y el nuevo contacto con sus amigos, sirve de arranque para reflexionar sobre el amor, la memoria, la amistad, la identidad, el exilio, la revolución, el choque cultural… son muchos temas pero todos ellos son abordados por el autor con una profundidad de pensamiento admirable por la sencillez en que queda expuesto por cada uno de los personajes.

La novela está narrada a dos voces, con una calidad y elegancia que llega a lo más hondo del lector por sus múltiples matices y sentimientos.

En definitiva, es una mirada agridulce sobre la vida y su fragilidad pero siempre intentando sobreponerse,  como él mismo comentó en una entrevista para El País en octubre de 2012, hablando de ésta su última novela: “muchos compartimos el sentimiento de que no hay luz al final del túnel, pero la hay, aunque no la veamos. Ahora bien, ¿es posible que tengamos que vivir años de locura y de violencia antes de llegar a la sabiduría? Es posible. Hizo falta el horror de los años treinta y la II Guerra Mundial para que Europa dijera ‘basta’. Puede que el destino de la humanidad sea tener que estrellarse contra el muro para sentir así su dureza y buscar otra salida”.


Mercedes Santos

lunes, 9 de marzo de 2015

 Hola,

Ando un poco retrasada con la actualización del blog. De hecho el mes pasado no llegué a colgar la reseña de "El mundo" que redactó Julia. Mea culpa. 

 Os dejo la presentación que nuestra anfitriona de este mes:

   
Massimo Montanari, medievalista y "gastro-sabio" nos presenta un ensayo ligero y fácil de leer sobre la alimentación. Una visión antropológica e histórica sobre una necesidad hecha arte que se vale de la ciencia y la tecnología, desde mucho antes de lo que pensamos. Una reflexión sociológica sobre qué comemos y cómo y porqué lo hacemos. 
Y sentencia :
 " La comida es cultura cuando se produce, porque el hombre no utiliza sólo lo que se encuentra en la naturaleza, sino que ambiciona crear su propia comida. La comida es cultura cuando se prepara, porque, una vez adquiridos los productos básicos de su alimentación, el hombre los transforma mediante el uso del fuego y una elaborada tecnología que se expresa en la práctica de la COCINA. La comida es cultura cuando se consume, porque el hombre, elige su propia comida según criterios económicos y nutritivos o simbólicos."
 
Pili Paneque